ET DIXI: NUNC COEPI.

31.12.11

Happy new year.

Me voy a dejar de tonterías, porque tengo demasiadas ganas de sonreír  y olvidarme de todo como para ponerme versión melancólica. Un poco de alcohol, mezclado con todo lo bueno del año pasado, que son inevitablemente personas. Ahora sí, juguemos niños, y ya volveremos a ver que pasa, de nuevo.



30.12.11

No voy a despertarme porque salga el sol.

Un poco de música melancólica, y ese razones para creer con el que Coca-Cola cuentas las horas que quedan para cambiar de año han hecho decrecer mi estado de ánimo. Se suele hacer balance llegados a este punto. El cúmulo de cosas buenas, malas, de cambios, en general. Pero yo detesto eso, supongo que porque tengo la manía de verlo todo con mi halo pesimista, y hacer balance de lo negro, no es merecedor de ser un entretenimiento.

He adorado muchos momentos, muchas risas, muchos juegos, muchos de mis autocuentos y todas esas extrañas maneras que tengo de permitirme ser feliz alguna vez. Por contraposición, tengo el cúmulo de desorden, caos y catástrofe que crea mi tendencia a despreciar profundamente la felicidad. No puedo evitar centrarme en las carencias, en lágrimas, en impotencias. Ser la más tonta, la más fea, la menos interesante. Ni me doy pena, ni me amo demasiado. Pero nunca voy a dejar de querer utopías ideales, absurdas e irrealizables, porque sino... tal vez perdería la gracia. Me gusta ser dramática.

A todo el mundo le gusta decir empecemos una vida nueva, pero sabemos que es mentira, para que perder el tiempo. Un 31 que pasa a 1, que salga el sol, que ya veremos.


26.12.11

Esta vez se dedicaba a oír un poco del maestro Sabina.

Esta es la emboscada, la idiota emboscada que uno mismo se prepara. El traspiés. El revés. Y sin más, dejar todo de lado. Adiós muy buenas, lo doy por terminado. Dejaremos para otro momento el análisis que deberíamos hacer del acontecimiento. Es demasiado abstracto el pensamiento como para poder aguantar un segundo más centrada en ello.

Ni si quiera se si tengo suficiente capacidad para entender lo que digo, para saber lo que pasa. Ni si quiera puedo correr el riesgo de saber si quiero saberlo, ya ves lo sencillo de hacer enrevesado un complicado lío. Pero bueno, esta cuestión se va de las manos, y con semejante facilidad se hace añicos. No lo intentes, de verdad, yo tampoco puedo.


Mientras el ruido, tus miradas al cielo.

6.12.11

Supongo que esto no era lo que necesitabas oír en este momento.

Dejar de llorar cada dos por tres. Aunque no poder evitar dejar volar la mente. No poder evitar bajar las comisuras, y activar el endemoniado tic que las mueve inquietas cuando se revuelven pensamientos, recuerdos, deseos, ex-deseos. Ilusiones, y ansias plenas de ausencia de esperanza. Es verdad, pero me gustan mucho los pero. Los sin embargo. Los no obstante. Cosas que pasan. Costumbres que uno coge.

Detonantes, como palabras de Dan Humphrey a Blair Waldorf. Como toda emoción o sentimiento que revindica el pasado que ha pasado, aquí no exiten cuentas atrás, es uno, dos, tres, y más, a pesar de

-Chuck is stopping you.
-No, I haven't even spoken to Chuck.
-You don't have to. You two have some strange force field effect on each other. Physicists should study it.



"No lo necesitas, vosotros dos ejercéis un extraño campo de fuerza el uno sobre el otro".

Guau.


29.11.11

Lecturas rápidas.

Hola pequeño rincón de enfermedad crónica curada sin cura que no cambia, solo se transforma, se camufla y sigue la inercia de la locura que enerva cada pequeño átomo ilusorio de un estado de psicosis nuevamente crónica, constante, profunda. De parloteo intenso que dice mucho sin decir nada, que es solo ruido que envuelve palabras, que se maquillan y parecen hasta bonitas, libres, sueltas, no ligadas, nuevamente a nada. Al pensar por pensar, es gratis el sueño, pero también es gratis la queja, la infelicidad, el inconformismo, la lucha suicida por la utopía paradójica que quieres ver, pero no quieres ver cumplida. Juegos de palabras, indescifrables, que juntos suenan hasta cultos, estos cúmulos desastrosos de pensamiento recambolesco, negro, oscuro, el alma pura y casta, que se hace intensamente sucia, angustiosa, rebuscada. La felicidad que se ha perdido solo por no saber querer y poder decir cosas profundamente claras, la nitidez brillante e impía debería ser una obligación en este mundo de deseos incumplidos de constantes rupturas de monotonías amadas que están más tranquilas siendo negadas. No es por pesadez, es el placer putrefacto de adorar el vicio  absurdo, bonita palabra, de la crítica constante, la forma de vida que se elije para vivir en un sin vivir que diga emoción eres bienvenida. Recuerdos de película solo porque es más agradable el almacenaje ideal que el almacenaje que deja el objetivismo de la realidad, es más para que creer en el realismo si todo aquí es pura subjetividad, y las certezas se basan en el cúmulo de afirmaciones falsas que arbitrariamente tomamos como susodicha realidad. Esto si es vida, esto si es comodidad, vuélvete loca, más. Total, qué más da, si pierdes lo que ganas, si ganas lo perdido, las vueltas que no te las quiten que muy aburrida es la linealidad, el camino más corto no es el de verdad, es por el que más pierdes vida, por el que más pierde gratuidad de sueños, quejas, infelicidad y plena, plena felicidad.

*Me parece recomendable leerlo como lo hago yo, así, sin comprender nada, y con pura velocidad de palabra.


20.11.11

C'est la vie, get the life.

Son habitáculos vacíos, ruidos, all you need is love que se han ido.
Podemos volver al principio. ¿Sentido? ¿Qué sentido? Este caos es solo mío.
Puertas, ventanas, tic-tac que no para, no sabe jugar a ocultar su llegada.
Un poco agobiante, más bien agonizante, estos sueños vecinos bonitos, lejanos, reales, tal vez también ideales.
Cúmulo de redes comparativas, que saben hacer daño, hurgar en heridas.
C'est fini querida, démosle tiempo a la partida.




.
.
.


Come on!

16.11.11

Fuera de servicio.

Días malos que se acumulan en el pecho, en la garganta formando estos intensos nudos sin lazadas. Días absurdos, que carecen de sentido y dejan ridículo a tu mundo. Días, o llamémosles momentos, que van y vienen cual enrevesados senderos. Retroceden, caen, suben, desaparecen y dan por perdido todo lo que merece.

Soñando gratis a través de la ventana. Jugando a que ese aire frío encienda una luz apagada. Ignorando aleteos, ignorando mentales tus propias palabras. Es la duda constante, y la mentira fiel. Decir un no lo sabes cuando es un sí lo sé. Negar veinte veces, no afirmar ni una vez. Retazos los momentos de aquello que se esconde, retazos de piedades tan ausentes como torpes.


15.11.11

Sara.

Princesa, que subes y que bajas
siempre con dulces sonrisas
del trono a cada plaza;
que juegas entre prisas
a descubrir como se gana;
que ganas y me ganas,
que nos ganas a todos.

Odiarte solo un poco,
suavizado al extremo
de haber olvidado cómo.
Si te hablo, si te cuento,
si te doy estos rodeos
que vuelven al cuerdo loco,
entre carcajadas que valen su peso en oro.

Te regalo una palabra,
que si nunca habría apostado, ahora lo haría;
tú me enseñas musical la poesía,
nos motivamos para ejercer cuales poetisas,
y yo, sin lugar a dudas,
dudo que a estas alturas
no sepas la palabra, amiga.



7.11.11

Home sweet home.

Puedes quejarte. Odiarlo. Detestar sus cuatro paredes, y el mundo del que te hace rodearte. Puedes querer irte. Puedes correr. Huir. Puedes negarlo. Y finalmente, puedes hasta arrepentirte.

Seguiré con las quejas, puro vicio. Pero la quiero. Odio sus cuatro paredes, y sin embargo, cada día aparecen con nuevos matices para, como quien no quiere la cosa, sorprenderme. Estoy tan profundamente enamorada del mundo, de ese mundo que gira a mi alrededor que me he ido, me he ido volando, pero eso sí, corro para volver.


Esa sensación de pequeña nostalgia. De negación del cambio. De afirmación de que no debería haber sido el momento. 
Estática era más bonita.



3.11.11

Siempre hay algo de razón en la locura.

¿Se puede ser más bipolar que yo ahora mismo?

Estoy tan altamente hundida y tan profundamente elevada, que parece mentira si un rato te digo que estoy acabada y al siguiente te regalo esta sonrisa limpia, inmaculada.

Quizá sea un juego de palabras. Decepciones que te amargan. Ilusiones que arrebatan.
Quizá sea la más grande de las mentiras. Renunciar al te quiero y empezar con un te adoro.
Quizá es solo el final de un final muy largo, y el principio del fin de la agonía, que sea hace entre carcajadas, alegría.

El juego, la tontería, el no me entiende, ni yo me entiendo, risas, palabrería; algunas lágrimas falsas y otras muy doloridas, aullidos descontrolados, verdades según quien las mira; error o no error, identificación de la infracción, sumirte en la infravaloración, armarte de valor, amarte sin consideración; quererte, perdonarte, no mirar atrás, estar contigo sin juzgarte más de lo normal; al fin y al cabo, solos tú contigo es la única compañía de la que siempre te podrás jactar; el juego de la relatividad, el silencio, la guerra, la paz en su mudez; el caos, la decadencia, principios de este algo, y esta nada, inercias nuevas.

Estamos jugando, y estamos jugando mal. Pero, en fin, me da igual. Punto y a parte, que no me gusta el punto y final.


"Oh just leave me now. It's the better thing to do. It's time to surrender. It's been too long pretending. There's no use in trying when pieces don't fit anymore".


Silence.

Y toda la alegría y la paz que había en estos nuevos sueños se ha desvanecido. Todas las ilusiones e imágenes. Todas las risas, sonrisas, caricias. Todas porque no me las merezco.

Me había ido en una burbuja de cristal hasta el cielo, pero ahora se ha roto, y mis pies vuelven a estar sobre el suelo.

It has gone. Forever.

Realmente soy libre, pero esta libertad me ha costado más de lo que me podía permitir dar.

I should have been as simple as 'let it be'. But I really really needed to destroy it.

Acabada la guerra, supongo que no hay vencedores, solo vencidos. Los que pierden, y los que siempre hubieron perdido.

Let it be. Let it be right now.


2.11.11

Ya no te preocupes más por mí.

Cuando quieres mucho a alguien la noción de que esa persona no se pase las horas pensando en ti constantemente, que no imagine que haría contigo, que no desee estar a tu lado, te parece de lo más absurda. Te parece totalmente incomprensible. ¿Cómo puedo yo estar así y qué ninguna fuerza mayor le haga a él sentir lo mismo? ¿Cómo puede ir una fuerza tan grande en una sola dirección y no despertar reacción? Explícamelo Newton.

Hasta que un día, simplemente, lo comprendes. Lo comprendes, y se acabó.


"Me curaste de ti".


No.
Me han curado de mi.
Es eso.


No obstante, hay quienes nacen para estar enfermos.


31.10.11

¿?

Como me gusta cometer los mismos errores, se dijo a sí misma, cuando me doy cuenta, he caído. Esa verborrea compulsiva. Esa sonrisa de tonta. Aún a sabiendas de que lo mejor es quedarse callada, que el silencio nunca estropea nada, soy incapaz de no pronunciar palabra. Será absurdo, pero ha pasado tantas veces que mentarlo, hace que sea falso. Ojalá tuviera la capacidad de no arañarlo, pero esos rasguños soy yo, y todo lo que me he inventado. No sé a que estoy jugando. A hacer de algo bonito, algo extraño. No sé a que estoy jugando. A hacer de tonterías realidades de mentira. Se me escapa de las manos, será que nunca lo he agarrado. Sostén fuerte mi cabeza, y dale al pause de mi imaginación. Anula las esperanzas, y asimila que los sueños, sueños son. Repites trabalenguas absurdos, que nunca traban de verdad, tú sigues siendo (in)capaz. ¿A qué juegas? ¿A tabús de mentira y obsesiones compulsivas?

Seguía su discurso. ¿Sabes cuál es el problema? No sé estar parada y ser feliz como cualquiera. Me encanta hacer de lo sencillo una construcción difícil. Llegar a paradojas que no sean otra cosa que imposibles. Esto me pasa por no hacer guías, no hacer planos, y dejarme a mi mente el juego de ir al grano. Construyó laberintos para perderme en ellos. ¿Para qué quiero caminos si luego les gusta esconderse y hacerme perder el sentido?

Está bien. No, no lo sé. Querer o no querer. Poder o no poder. Que dependa de ti, o que no tenga nada que ver. Que emborrones lo puro con esa necedad demasié. ¿A qué estás jugando? ¿A romper platos, esconder piedras y tirar manos?

La cordura nunca fue su fuerte, pero uno se agobia, cuando la locura no se evapora, solo se transforma.





26.10.11

Wandering.

¿Por qué sigues haciéndote la dura? No lo sé, supongo que no considero pertinente retractarme, ya no. Culpa de uno, culpa de otro, al fin y al cabo, el tiempo es tiempo y lo cura todo. Hay cosas que tienen tantos añicos que siempre tendrán grietas, y cosas que aún recomponiéndose perfectas vuelven a caer una y mil veces, pero las peores son las agrietadas que vuelven y vuelven a romperse. ¿Qué más da? Eso no justifica ningún patrón de conducta. ¿Quieres evitar nuevas caídas?[...] Veo venir nuevas caídas, no voy a malgastar tiempo. Y por eso, simplemente, prefieres consumirte por dentro. No me consumo, estoy bien, estoy mejor. Lo siento, pero me hartan tus tonterías. ¿Crees que tus negaciones producen algún efecto sobre mis certezas? No quiero producir efectos, sois tú y tus tonterías las que me hartan a mi. Siempre queriendo hacerme daño, siempre rumiando ideas absurdas. Podrías parar alguna vez. No querer echar de menos, ni querer echar de más. Podrías estabilizarte y dejarme vivir tranquila, y no pagar conmigo lo que a ti te reconcome. Vamos querida, ¿ahora soy yo culpable? Qué sencillo darle la vuelta a la situación cuando se trata de nosotros dos. Esto ni es cosa nuestra, ni es decisión tuya. Esto es así, tú solo tienes que aceptarlo. A ti puede que consigas engañarte, pero conmigo no tienes nada que hacer.


22.10.11

Qué bonito.

Lo sencillo aburre, es insoportable. Lo fácil y cómodo, todo lo que conlleve una estabilidad, me desequilibra. O puede que ya esté desequilibrada, pero es inevitable, necesito combatir la inestabilidad con más caos. Algo que me gusta, me encanta, me alucina e incluso a veces, me hace feliz. Tan feliz como desdichada. Tantas risas como lágrimas. De repente, en medio de la locura aparece un equilibrio que estaba escondido, y todo lo que parecía negro se aclara para volverse del color que menos esperabas. Las quejas huyen y ese halo de alegría te invade haciendo torrencial la sensación de estar, dicho de forma sencilla, genial. Luego, el negro vuelve al negro, y todo está tremendamente mal, pero es lo bonito de este ciclo de necedad.

Hay un placer tan curioso en el hecho de pasarlo mal, que a veces no se me ocurre dejar de sufrir altruistamente.


17.10.11

Bradshaw.

Hablaría de algo nuevo, pero este rincón mental es crónico, y no se si eso se puede dejar. Me preocupo. Me agobio. Me detesto. Me odio. A la vez, me da todo igual. Pienso. Hablo. Me da pena, y aún no me callo.

Sex and the City, segundo final de Bradshaw y Big, a pesar de lo eterno de lo suyo, y una Carry desquiciada, nerviosa y de verborrea hiperactiva sobre su fallida relación. Tanto es esto así que el resto de las chicas acaban por decirle que deje de hablar de él, y que si tanto lo necesita vaya a terapia. Una vez allí comienza con un "mis amigas no me soportan más".

Esto me suena.

Podemos citar a una Carry acabada, sentada en la cama, portátil delante, cigarro en mano."A veces me pregunto si realmente había estado enamorada o si era adicta al dolor, al exquisito dolor de querer a alguien tan inalcanzable".

Sabía que este personaje era todo un ídolo. La moda, la escritura y el dolor. Es una mezcla de todo lo que en cierta manera siempre me he sentido, valga la redundancia, ser.










10.10.11

Redundancias comunes.

El círculo de locura enervante, intensa, transitoria y tan constante, de 0 a 2pi, y vuelta a empezar. Pasando otra vez por lo mismo, lo de siempre. Fingiendo que no cansa, que tiene que ser así.  El ser humano es el único animal capaz de tropezar dos veces con la misma piedra, o veces infinitas, con piedras tan cómodas, tan ilusoriamente bonitas. ¿Qué vas a decir? ¿Ya está? ¿Esta es la última vez? ¿Se acabó? ¿Adiós? Es ingenuo. Leete. Vuélvete a leer. Abúrrete de ver siempre lo mismo. ¿Quién te va a coronar en la monotonía de esta mediocridad? Puede que una vez estuviera bien. Puede que hubiera alguna vez, algún principio, fuera del círculo. El camino recto que se fue haciendo eterno. ¿Cómo te has podido perder? Peor aún, ¿cómo vas a retroceder? Está oscuro. Está frío. Está roto. Estremece. Hiere. Todo lo que puede hacer es nocivo, y sin embargo, que fácil embarcarse en esta aventura pro-masoquismo.

¿Es vergüenza? Tal vez ya sea lo que quede por sentir, y lo primero que se debería haber sentido. La inmadurez crónica que produce esta asociación de casos con gustos no cumplidos. Se que estoy cansada de repetirlo, pero ya está. Culmen del patetismo, y fin de del sin sentido. Recaídas cuando se rompan las alas, pero porque haberlas haya. 

Te pierdes.



Te vuelves, triste o felizmente, loca.

Vuelas.

Y hasta donde quieras...



3.10.11

Seriously.

A veces hace falta un poco de realidad. Tanta fantasía de esa como se llame no es nada buena. La cabeza en las nubes, y los pies como si no existieran. Una pena que cuando abres los ojos esa nada, es solo tierra. 



23.9.11

Panic attack.

Pánico.
¿Y si no?
¿Y si nunca?

Si cierro los ojos, los tapo con mis manos, impidiendo a la luz inundar mi oscuridad, entonces, a veces, y solo a veces, respiro profundo. Y aparecen esas imágenes, nítidas, casi reales. Y todo está al alcance de mi mano. Es casi verdad. Se elevan las comisuras de mis labios. Todo se llena de esa paz. Plenitud. Ya no hay "y si" que valga. Ahora todo es posible, en todas las magnitudes, en todas las direcciones. Este mundo, solo mío, es tan increíble que no sé si me quiero ir. Podría imaginar, horas y horas. Podría seguir siendo paralelamente feliz, sin necesidad de querer notar la diferencia.

14.9.11

Anyway.

Sé que no importa. Es mi lado más consciente el que ya sabe lo que hay. El que sabe a que achacar cada cosa. El que está cansado de lo rutinario. El que espera encontrar pronto un algo más. Las épocas de transición deben ser siempre así de intrigantes, y también melancólicas. Hasta que la balanza cede a ese impulso de querer conocer el futuro frente a toda la agonía que dejo el pasado, o todos los buenos ratos. Hasta ese entonces, todavía la inercia sigue jugando malas pasadas. Aún cuando sabes que da igual, y sabes que se acabó, cualquier pequeño nexo hace que lo recuerdes todo. La manía humana del "el otro día", que son dos años, aparece también en tu cabecita, para exclusivo deleite de uno mismo. ¿Es miedo el bucle que no permite terminar de cruzar el límite? Y aunque fuera miedo, el refugio en lo malo conocido postergando lo bueno por conocer, ¿es justo? La clave podría ser aceptar cómo ha pasado el tiempo, sonreirle y dejarlo ir. Adiós es una palabra muy común en el día a día, y muchas veces resulta más placentera que un hola. ¿Por qué es tan difícil decir adiós ahora?

Números que matan, dichosa capacidad de asociación y dichosa, caprichosa y cerda memoria selectiva.


Cerca del final, donde todo empieza.



---------------------------------------------------------------------
XLIX

Alguna vez la encuentro por el mundo 
Y pasa junto a mí;
Y pasa sonriéndose, y yo digo:
-¿Cómo puede reír?

Luego asoma a mi labio otra sonrisa
Máscara del dolor,
Y entonces pienso: -¡Acaso ella se ríe
Como me río yo!



11.9.11

What if? Again and again.

Siempre pasa lo mismo. La demencia surge mágicamente de entre estas palabras. Esta frase, o varias parecidas. ¿Y si...? Nunca se sabe... Y los escalofríos se adueñan de todo lo que tienen cerca, la piel se vuelve de gallina y el oxigeno no encuentra caminos para llegar al cerebro. Los segundos podrían confundirse con años. El murmullo se convierten en coches que derrapan y chocan, gritos de agonía, cristales que se rompen, y un silencio final con el último retazo de estremecimiento.

Había olvidado que todo eran decisiones mías. 
Se me paso por alto el efecto mariposa de cada semilla. 
No sabía el poder que tenía. 
Ignoraba que cada gesto, mirada, mal pronunciada palabra, ignoraba que hicieran explotar mundos, construir inquebrantables esos muros. 

Pero eso solo fue un momento de falsa fuerza, profunda debilidad. 
Solo yo tengo la capacidad de ponerme piedras al caminar.
Te preguntas a quién culpar, y esa respuesta solo la encuentras en el juego de luces de un cristal.

Sin embargo, a veces, ya da igual.

3.9.11

13, 1-13

Curiosamente todo suena mejor de forma epistolar, con un tú detrás de las palabras. Un destino que les de seguridad y firmeza. 

Puedo tratar de hacer eso. Pongamos el ejemplo de algo conocido, la carta de Pablo a los Corintios. Perdonad si no pongo el "San", pero nunca me ha ido eso de creer en Dios, y me siento más cómoda con un trato más informal, más de estar por casa. Bien, pues Pablo, o Saulo, es un iluminado más. Un día te encuentras luchando contra ellos, y al otro te unes a sus filas. Ya me gustaría a mí tener una visión de esas que te dejan todo tan claro como el agua. O lo más sorprendente, que te hacen cambiar así, radicalmente, de un extremo a otro. Aunque en este caso, y en muchos, siempre nos quedará la duda, ¿ficción literaria o realidad? No puedo evitarlo, es mi cerebro y su deseo de permanecer en un punto de ausencia de certezas. Finalmente, lo único que me veo capaz de afirmar es que alguna persona, que pudo ser este fiel nuevo cristiano, o cualquier anónimo de la historia de la humanidad, escribió unas palabras que resonaran en cada cabeza. Y lo digo por las raices cristianas de la cultura occidental y nuestra tendencia a seguir realizando el sacramente del matrimonio, una misa, y una lectura del Nuevo Testamento, capítulo 13, versículos del 1 al 13, la susodicha carta de San Pablo a los Corintios. A muchos nos parece ridículo, la fe no esta muy de moda últimamente, más bien demodé, y ni las Jornadas Mundiales de la Juventud la van a lograr salvar, con el pesar de muchos, y la indiferencia de la mayoría. Sin embargo, nuestro amigo Saulo, o nuestro amigo el creador de la historia de Saulo, llenó la Bíblia de esa palabra clave, esa que sí que es Dios de la humanidad entera, amor.

Seguro que si te digo "El amor es paciente, el amor es servicial; no es envidioso, no hace alarde..." ya sabes de que hablo. Porque bueno, ya se sabe, all you need is love, cantan los Beatles. Porque hasta el gracioso doblaje de Hugh Grant en Love actually deja claro, desde el principio que "si lo buscais, tengo la extraña sensación de que el amor, en realidad, está en todas partes". Incluso Liz Gilbert en su Eat Pray Love añade anécdoticamente que cuando una psicóloga amiga suya tuvo que trabajar tratando a unos refugiados camboyanos la principal preocupación de estos se basaba en "conocí a un chico, me dejó por otra, aún le quiero...". Somos, sorprendemente así.

Que mayor acto de fe, por tanto, que tener esperanza, y creer en el amor. Que mayor acto de fe que creer en su poder de creación, y de destrucción. Puede que parezca que los actos somos nosotros, pero siempre es él.


"Aún no tengo claro si lo he asimilado. Si es paciente o sevicial. Si es simplemente real. Si cada vez que termina es inercia o un tremendo estado natural. "Me da igual" parecen palabras fuertes, poco sinceras, aunque a ratos tan verdaderas como cualquier otras. Sí. No. Eso es realmente lo que da igual, cuando el caso se plantea con tal inverosimilidad. I am OK, if you're great. That's absolutely all."




29.8.11

Me gusta cuando tú hablas y se calla Neruda.

No tengo ganas de hablar. Tampoco de trasmitir ningún tipo de agonía, ni de queja. Últimamente vivo en el reino de la pereza, donde no hay nada que hacer. También me sumo a ratos en la nostalgia, y me da por sentir pena. Sin embargo, en el fondo, solo quiero sentimientos de alegría y paz, y de alguna forma tengo que lograr avivarlos. Que me de igual, lo que siempre hubo de dármelo, y que me importe lo que realmente es inevitable que lo haga.

Me pienso ir, y me alegro de ello. Pienso perderme y aparecer en un mundo nuevo. Pero sobretodo pienso no permitir que nada me haga dejar de sonreír. Estoy demasiado enamorada de mis propias carcajadas...

Cito, "Me gusta cuando tú hablas y se calla Neruda".




26.8.11

Fuck off.

Por favor, me muero por estar ebria. Por no sentir nada. Por ponerme una música impersonal y menearme sudorosa entre la multitud. 

No quiero pensar. No quiero ver pensar a los demás. No quiero que exista el dolor. No quiero que nadie pueda hacerse daño, ni que las personas tengan el gran poder de poder destrozar a otras personas. ¿En qué momento se adjudico ese talento el ser humano? En manos de unos esta la felicidad de los otros, como una cadena, una en la que quien no respira se ahoga, y quien termina respirando ahoga a alguien más.
Al final, todos terminan por decir que no pueden más, que van a morir de masoquismo, aunque ni si quiera saben si son ellos mismos, si son los demás. Todo negro, roto, mojado. Desordenado. Desorientado. Perdido.
Esas escenas de película dramática, donde uno corre bajo la lluvia, gritando. Llorando. Y cae de rodillas justo en ese asqueroso montón de barro. Y sigue llorando, y en un ataque de rabia patalea queriendo matar al barro, como si ensuciar de esa mierda todo lo que abarcan sus ojos ciegos fuera solución. Así. Simplemente, así.
Y sí, tras cada tormenta, calma. ¿Pero quién arregla los destrozos de la tempestad? 

El juego de las luces y las sombras. La nube que recorre traviesa el cielo tapando, a momentos, los intensos rayos del sol. El fugaz alivio, de la ausencia de luz, ausencia de calor. La sonrisa que  dibujan sola las comisuras, cansadas. Las ganas de cantar "¡Qué alegría más tonta! ¡Qué paz! ¡Qué bien, vivir!".
A veces, solo a veces, también es así.


22.8.11

Cobarde.

A veces me gustaría ser tan valiente como para hacer realidad todas esas intenciones que me salen de la nada y que luego, se pierden.



Ando un poco cansada de la realidad, y no voy a generalizar demasiado, porque no puedo negar que en mi faceta más egoísta, solo me importa el mundo que me rodea. Solo esa burbuja que yo me creo y en la que voy dejando entrar lo que me da la gana, o lo que no me doy cuenta de que se está colando... Tal vez sean estas filtraciones las que hacen que el poco oxígeno que de por sí me permito respirar se haya esfumado, y que ahora me dedique a sacar la cabeza y tomar aire de fuera, intentando conservar la inspiración todo lo posible, y soltando más mierda dentro. ¿Debería hacerle agujeros a la burbuja? ¿Romperla completamente? Sí, es eso, ¿a qué sí? Me voy a comprar una burbuja nueva, creo que si lo pienso hasta la tengo encargada...Sin embargo, tengo moral, sentido de la responsabilidad. No puedo abandonar una burbuja en mitad del caos mundano y refugiarme en otra, sería el colmo de ese egoísmo mío que mencionaba. Sería inaceptable que el resto del mundo tuviera que cargar con mi basura, o con mis tesoros.

Escuché por ahí que había un camino más correcto y más cerrado de dejarlo todo. Más difícil claro, pero suena tan bien no ser una cobarde. Además, uno no quiere que haya lastres que le puedan perseguir, de ahí lo cerrado de la nueva opción. El punto y final de la superación. Supongo que puedes jugar con tu mente a dejarlo todo a un lado y sonreír fervientemente pleno de nuevas ilusiones, de nueva felicidad. No es necesario esa carrera de sentido adverso a la sociedad, en busca de un autismo existencial. No hace falta refugiarse en el vacío, en el limbo del vivir. ¿Pero por qué suena tan tentador? 

¿Es porque me lo imagino todo tan claro, tan cómodo, tan iluminado? ¿Es por la paz que destila ese lugar? Nunca he estado, no merezco inventarme que un sitio terrible es un paraíso terrenal. Es injusto que lo considere mejor a todo lo demás. Es absurdo. Es tonto. Y ridículo. Y es... como yo lo veo.

¿A la mierda la burbuja? En fin, ya iremos viendo.




[...]

15.8.11

Un poco de verde y un poco de azul.




La Granja.





 Zarza de Granadilla.




Suances.





Santander.





 San Vicente de la Barquera.





Comillas.





Parque de la naturaleza de Cabárceno.








Castro-Urdiales.





Laredo.






Santoña.







Bilbao.






Potes.








Burgos.


...y de vuelta aquí.